Los implantes dentales son raíces artificiales diseñadas para sustituir las raíces de los dientes que se han perdido o que por motivos de salud deben extraerse. Sobre estas raíces se asientan las coronas o prótesis dentales que sustituyen a los dientes naturales.
En la actualidad, los implantes dentales son muy sofisticados y son capaces de integrarse por completo, sin ocasionar ningún daño en el resto de los tejidos de la boca.
¿El implante dental es doloroso?
Aunque se trata de un procedimiento que resulta muy tolerable para la mayoría de las personas, lo cierto es que existen varios factores que pueden hacerlo más o menos doloroso y molesto. De esta forma, no es lo mismo colocar un solo implante que colocar varios; ni tampoco es lo mismo realizar una cirugía con injertos óseos que otra sin ellos.
En cualquier caso, la cirugía de colocación del implante dental se realiza con anestesia local, por lo cual las molestias deben ser mínimas. En otras ocasiones, por indicación facultativa, la intervención puede hacerse incluso utilizando sedación general.
¿Qué se siente tras la colocación de un implante?
Una vez que el odontólogo ha finalizado la colocación del implante y que la anestesia empieza a perder efecto, es normal experimentar algún tipo de molestia o dolor. Se trata de un malestar muy similar al que se siente cuando se sufre la extracción de un diente y debería ser fácilmente paliado con algunos analgésicos previamente prescritos por el odontólogo.
Recomendaciones tras una cirugía de implante dental
Con el fin de minimizar en la medida de lo posible las molestias y el dolor por un implante dental, resulta conveniente…
- Guardar reposo durante las siguientes 24 horas y aplicar frío en la zona local externa.
- No comer ni tomar alimentos ni bebidas calientes hasta que la sensibilidad en la zona anestesiada se recupere. Debe tenerse mucho cuidado al comer, evitando los alimentos duros y tratando de no masticar con los implantes.
- Beber abundante agua para mantenerse hidratado.
- Mantener una correcta higiene bucodental evitando, eso sí, cepillar la zona afectada. Durante los siguientes días tras la intervención, debe evitarse el enjuague bucal. Por su parte, el hilo dental no debe emplearse hasta pasado un mes tras la cirugía.
- Evitar el consumo de alcohol y tabaco que pueden irritar la zona y dificultar la curación de la herida provocada al colocar el implante.
- No realizar actividad física de intensidad durante una semana tras la cirugía. De esta forma, la presión arterial se mantendrá estable y se disminuirá el riesgo de sangrado.
- Dormir con la cabeza ligeramente más elevada que el resto del cuerpo.
- Tomar los analgésicos prescritos por el odontólogo para reducir las molestias y el dolor.
¿Qué hago si mi implante sigue doliéndome transcurridos unos días?
Aunque la cirugía de implante dental es un proceso bastante invasivo, lo cierto es que las molestias (en la zona afectada, las encías y las mejillas) deberían disminuir considerablemente en un periodo de dos a tres días.
Si pasado este tiempo, persiste el dolor y la inflamación (o van en aumento), existe sangrado abundante o se experimenta alguna reacción a algún medicamento, deberá consultarse con el odontólogo sin demora.