Una de las partes fundamentales que tiene el proceso de higiene dental es el uso del hilo dental. Aunque muchas personas piensan que con un cepillado de dientes basta para tener unos dientes limpios y evitar las caries, lo cierto es que con el cepillo de dientes no podemos alcanzar todas las superficies que necesitamos limpiar.
Beneficios del hilo dental
La seda dental se utiliza para limpiar los espacios interdentales, es decir, las dos caras de cada diente que no podemos alcanzar a limpiar con el cepillo de dientes, así como el espacio en que la encía se junta con el diente.
En estos espacios pueden quedar restos de alimentos que pueden empezar a descomponerse. También son unos lugares de nuestras bocas donde la placa bacteriana puede proliferar generando sarro, caries y la enfermedad periodontal. Cuando utilizamos el hilo dental, además de poder extraer esos restos de alimentos que se puede quedar atrapado en los espacios interdentales, también removemos la placa bacteriana.
Es muy importante tener en cuenta que la mejor forma en que podemos remover la placa bacteriana en estos espacios es mediante el hilo dental, puesto que ni siquiera los colutorios pueden llegar a los espacios entre la encía y el diente.
Las enfermedades que puedes prevenir con el uso del hilo dental son:
- Obviamente, la caries en los espacios interdentales (que además es muy complicada de detectar a tiempo al no darse en un espacio visible).
- La enfermedad periodontal, piorrea o enfermedad de las encías. Esta enfermedad comienza produciendo gingivitis o inflamación en la encía, pero puede terminar en un retraimiento de la misma y en que los dientes pierdan su soporte en el hueso de la mandíbula y se caigan.
- El mal aliento producido por las bacterias que conforman la placa.
Cómo usar el hilo dental
Aunque puede parecer un poco complicado al principio, utilizar el hilo dental es realmente sencillo. Sólo requiere un poco de práctica. Las primeras veces que lo utilices quizá te pueda llevar cinco minutos, pero cuando lo manejes con soltura, tardarás mucho menos. Cómo aumentar tu higiene con el hilo dental:
- En primer lugar tienes que cortar unos 30-40 cm de hilo.
- Enróllalo por los extremos en los dedos corazón de cada mano, hasta que quede sin enrollar un tramo de unos 10 cm.
- Utiliza los dedos índice para controlarlo. Hay que apoyar el hilo dental en el punto de contacto entre los dos dientes, y empujarlo muy suavemente con un movimiento en forma de sierra o en zigzag en los espacios interdentales hasta llegar, suavemente a masajear la encía, apoyando el hilo primero en un diente y después, con el mismo movimiento en sierra, en la otra pieza dental. Puede que la encía sangre un poco pese a que lo hayas hecho con toda la suavidad del mundo. No es que lo hagas mal, ni que sea malo para ti que utilices la seda dental. Al contrario, es un signo de que tu encía está un poco inflamada, probablemente debido a la placa bacteriana.
- Para sacarlo, también haz el movimiento en zigzag suavemente en sentido contrario.
- Repite el proceso en todos los espacios interdentales.
- Te recomendamos hacerlo siguiendo un orden para no saltarte ninguna pieza dental en el proceso y, sobre todo, que lo hagas, al menos, una vez al día.
Tanto si necesitas asesoramiento sobre cómo llevar a cabo de forma correcta la higiene de tu boca, como si quieres revisar tu estado de salud de tu boca o que te ayudemos a solucionar cualquier problema relacionado con la salud bucodental, no dudes en que en Clínica Dental Barcelona vamos a poner a tu disposición a los mejores profesionales. Llámanos.