Cuando hablamos de salud, muchas veces se nos olvida el papel fundamental que la boca tiene en ella. Entre otros factores que pueden dañar tu salud, el tabaco perjudica los dientes, además de provocar otras muchas consecuencias nocivas para el organismo.
Riesgos del tabaco en los dientes
Encías dañadas
Las encías son de tejido blando y absorben con facilidad los componentes químicos del tabaco. No obstante, la consecuencia más visible es que el humo del cigarrillo mancha los dientes.
Manchas de tabaco en los dientes
Son las marcas manifiestas del mal hábito por el tabaquismo. La nicotina y el alquitrán se adhieren a tus dientes y producen un cambio en su coloración. Además de resultar antiestético, alertan sobre el mal estado en que se puede encontrar tu boca.
Mal aliento
Además de alquitrán y nicotina, el tabaco contiene numerosos compuestos químicos que le proporcionan un olor y sabor característicos. Estos compuestos modifican tanto tu saliva como la cantidad de bacterias de tu boca. La consecuencia de la mezcla es la aparición o empeoramiento de un aliento permanentemente desagradable.
El gusto y el olfato disminuyen
Debido a la mezcla de componentes incluidos en el tabaco, los fumadores ven menguados sus sentidos físicos. Pueden llegar a no percibir olores de sustancias potencialmente peligrosas o sabores como el salado. Esto podría contribuir a que aumentaras el consumo de sal y desarrollaras hipertensión.
Encías débiles
Las sustancias incluidas en el tabaco son tóxicas. Al entrar en contacto directo con la encía, a través del humo, penetran en tu organismo y disminuyen tus defensas ante los ataques de las bacterias. Este hecho también influye en tu recuperación tras una intervención odontológica, ya que la vuelve más lenta.
Periodontitis
Cuando tus encías enferman suelen sangrar. No obstante, los fumadores ven reducido su riego sanguíneo, por lo que este síntoma se ve ocultado. La consecuencia es un retraso en la detección de esta enfermedad, tal vez cuando ya esté muy avanzada.
Implantes dentales que fallan
Si tus defensas están mermadas por el tabaco y tus encías responden peor, es lógico que necesites sustituir con mayor frecuencia tus implantes dentales.
Riesgo de cáncer
De todos los componentes del tabaco, 400 son cancerígenos. Si le unimos las defensas más bajas y una peor reacción de las encías, el riesgo de desarrollar cáncer se incrementa en los fumadores.
Tratamientos dentales para fumadores
Para mejorar el aspecto y la salud de tus dientes, la primera recomendación y más básica sería dejar de fumar cuanto antes. Pero, además, existen algunos tratamientos para tratar de corregir los efectos causados por el tabaco sobre tu dentadura:
- Higiene básica más frecuente. Es fundamental cepillarse tras cada comida, utilizar enjuague bucal e hilo dental. Pero si eres fumador tal vez te convendría algún cepillado y enjuague adicional.
- Limpieza profesional. Visita a tu dentista con frecuencia. Para quitar las manchas de tabaco en los dientes necesitas una limpieza dental en profundidad a menudo. Consulta al odontólogo para que te recomiende la frecuencia adecuada de este tratamiento, según tus circunstancias personales.
- Blanquear los dientes. Con el tratamiento de blanqueamiento dental, tu dentista te aplicará unas férulas con agente blanqueante para conseguir recuperar el estado inicial de tus dientes. La mayoría de las manchas pueden eliminarse con este sistema.
- Carillas dentales. Para aquellas manchas que no se han podido suprimir, tu odontólogo podría colocarte unas fundas de porcelana o composite dental como complemento al blanqueamiento dental.